El primatólogo Frans de Waal en su último estudio
realizado en conjunto con Zanna Clay y publicado en la revista `Proceedings of
the National Academy of Sciences´ muestra como los bonobos (Pan paniscus) aprenden a gestionar sus
emociones de una manera muy parecida a como lo hacen los niños humanos. De manera
espontánea ofrecen consuelo a otros miembros de su grupo que se muestran
alterados tras verse involucrados en una situación angustiosa o peligrosa.
El Pan
paniscus es uno de nuestros parientes más cercanos, con ellos compartimos
el 98,7% de nuestros genes. Además, se le considera un animal más tolerante y pacifico
que otros grandes simios. Adicionalmente los bonobos suelen mostrar empatía hacia
otros miembros de su grupo, tanto si son parientes como si no lo son.
Estos científicos estudiaron tanto la forma en que los
bonobos controlan sus propias emociones como su reacción cuando son otros
miembros de su grupo los que se llevan un disgusto. Pudiendo comprobar que
aquellos individuos que recobraban la calma rápidamente eran también los que
mostraban más empatía hacia sus compañeros. Una empatía que trasmitían intentando
calmarlos a través del contacto físico, por ejemplo abrazándolos y besándolos.
Comparando el comportamiento de bonobos huérfanos y
no huérfanos se ha concluido que aquellos que habían pasado su infancia con su
madre recobraban antes la calma tras un disgusto y mostraban mayor empatía hacia
otros que los bonobos huérfanos de cualquier edad.
Los científicos creen que el papel de la madre es
crucial a la hora de gestionar las emociones y aprender habilidades sociales. “Cualquier
similitud fundamental entre humanos y bonobos probablemente se remonta a su último
ancestro común, que vivió hace alrededor de seis millones de años”, explica Frans
de Waal.
De Waal sostiene que los estudios sobre las
emociones animales pueden aportar información valiosa sobre la sociedad humana.
Referencia
De Waal, F. y Clay, Z. (14/10/2013). Los Bonobos Aprenden a Gestionar sus
Emociones como los Niños Humanos. Madrid: El Mundo
Dr. Félix Piñerúa Monasterio